Los celos son considerados como un sentimiento normal si se presentan con intensidad limitada, controlada y de forma ocasional sin que formen parte de un problema parcial; son parte del desarrollo emocional de los seres humanos.

La celotipia se basa en los celos compulsivos, manteniendo una incapacidad para aceptarlos, confrontarlos, controlarlos y solucionarlos.

Son aquellos celos que pueden llegar a causar problemas de posesión, fantasías, control, agresividad psicológica y/o física.

Los celos nunca desaparecen de nuestra vida, ya que pueden surgir en cualquier momento como parte de nuestra naturaleza, aunque de forma moderada, sin afectar el equilibrio mental ni el contacto con la realidad.

La celotipia se presenta como un delirio, es decir, tiene como eje una idea falsa, sin ningún argumento lógico o prueba de realidad que lo demuestre. Pueden darse en ocasiones estas fantasías debido a una situación real del pasado.

El individuo desarrolla sentimientos de celos tan intensos que son el epicentro de su vida, de su forma de actuar y pensar.

Su sintomatología debe durar por lo menos un mes para diagnosticarla como celotipia y, aunque suele ser un trastorno crónico, sobre todo en el tipo persecutorio, a menudo se producen oscilaciones en la intensidad de las creencias delirantes, por lo que su curso es variable.

CAUSAS:

• Experiencias traumáticas en otras relaciones o en la actual
• Experiencias de infidelidad (siendo infiel o que le sean infiel) en el presente o pasado.
• Saber que su pareja no está satisfecha sexualmente a causa de alguna disfunción sexual como: disfunción eréctil, eyaculación retardada, eyaculación precoz etc.
• Problemas de pareja
• Relaciones violentas de forma física y/o psicológica
• Baja autoestima
• Inseguridad de no satisfacer sexualmente a su pareja
• Experiencias de seres queridos y/o cercanos que les han sido infiel
• Intento del control de la relación
• Dependencia
• Temor a la soledad
• Sensación de abandono